Cómo limpiar tus persianas venecianas
Hay que tener en cuenta que, en función del sitio dónde esté colocada tu veneciana, habrá que limpiarlas con mayor o menor frecuencia ya que sitios como la cocina suele adherirse algo de grasa a ellas. No obstante, nuestra recomendación es incorporarlas en tu rutina de limpieza semanal.
Ahora bien, ¿Con qué puedo limpiarlas?
· Plumero.
· Guante de algodón.
· Paño o bayeta de microfibra.
· Aspirador con una boquilla de cerdas suaves (con esto evitaremos rayar las lamas de aluminio).
* Existe también un accesorio especial para limpiar persianas venecianas, recomendable en el caso de que hayan acumulado mucho polvo o suciedad. Se trata de un plumero ramificado, apto para colarse entre las lamas y limpiar todos los huecos imaginables sin esfuerzo.
1. Primer paso: bajar las persianas venecianas y cerrar las lamas.
El primer paso es bajar las persianas y cerrar las lamas. Sujeta la persiana y retira suavemente el polvo, lama por lama, con el cepillo o tus propias manos y los guantes. Si quieres limpiarla más a fondo (en el caso de las persianas de aluminio) puedes descolgarla y, en un patio o zona habilitada para lavar, mójala con una manguera con un poco de presión (demasiada haría que se pudiera dañar la veneciana). A continuación la puedes enjuagar con algún producto de limpieza o, incluso con jabón. Finalmente, con una bayeta seca, poco a poco vas quitando el agua hasta que esté completamente seca.
2. Segundo paso: darle brillo.
En el caso de ser una persiana veneciana de aluminio cualquier multiuso servirá para ello. Coge un paño de microfibra y mójalo con producto, después aplícalo lama por lama para darle un acabado perfecto.
Si por el contrario, tu veneciana es de madera, los pasos serán los mismos, pero en esta ocasión utilizaremos un producto especial para al limpieza de madera, que además de protegerlo y alargar su vida, le aportará brillo.